El jamón ibérico es uno de los alimentos que abandera nuestra gastronomía. Pero además de ser delicioso, aporta numerosos beneficios para la salud por sus diferentes nutrientes. Es el caso del ácido oleico en el jamón ibérico, del que hablamos hoy en este post de Grupo Julián Becerro.

El ácido oleico en el jamón ibérico

Antes de hablar de sus beneficios, explicaremos brevemente qué es el ácido oleico. El ácido oleico es un ácido graso monoinsaturado, con un único doble enlace en su estructura química, perteneciente a la familia de los ácidos grasos omega 9. El ácido oleico se engloba dentro de las grasas saludables.

Se obtiene principalmente de aceites vegetales o naturales como el de oliva, aguacate, cártamo, girasol o de semillas de uvas. Por otra parte, también se encuentra en la carne de cerdo, pavo y pollo, así como determinados frutos secos, como es el caso de las bellotas, avellanas, nueces, pistachos y almendras.

En el caso de la carne de cerdo, cabe destacar que el cerdo ibérico contiene un mayor porcentaje de ácido oleico que el de cerdo blanco. Esto se debe en gran parte a la dieta que lleva cada tipo de cerdo.

El cerdo ibérico durante la época de la montanera consume gran cantidad de bellotas y otros frutos que encuentra en la dehesa. En concreto, las bellotas alcanzan aproximadamente tasas de un 60% de ácido oleico.

Beneficios del ácido oleico en nuestra dieta

El ácido oleico presente en el jamón ibérico ayuda a mejorar la salud cardiovascular. Es decir, a cuidar nuestro corazón.

Por un lado, ayuda a reducir el colesterol malo, que es el que obstruye los vasos sanguíneos, con sus consiguientes riesgos para la salud. También disminuye la presión arterial y el nivel de triglicéridos en sangre.

Por otro lado, promueve la función cerebral, mejorando la capa que protege las neuronas y los nervios cerebrales. Todo esto ayuda a evitar un deterioro prematuro, retardando la aparición de enfermedades como el Alzheimer y determinadas demencias.

Además de todo esto, el ácido oleico ayuda a mejorar las defensas al favorecer el aumento de glóbulos blancos, lo que evita infecciones y mejora la forma de combatirlas.

Las propiedades anti inflamatorias del ácido oleico ayudan a regular la liberación de la insulina para pacientes con diabetes tipo 2, favoreciendo la absorción de la glucosa.

Por último, el ácido oleico previene la formación de cálculos biliares, protegiendo el hígado y ayuda a regular el metabolismo de las grasas, y por tanto a mantener un peso adecuado.

Ahora que ya conoces todos los beneficios del ácido oleico en el jamón ibérico, tienes unos cuantos motivos más para consumirlo con regularidad. ¡Además de delicioso, el jamón ibérico cuida de tu salud!